
Una vez finalizada la etapa de desove y pasando por todos los pasos de desinfección y pesaje, todos lo huevos son puestos en un vaso incubador donde por medio de los sistemas propios del sistema, inicia el proceso de eclosión, que es el nacimiento de los alevines.
Cuando los alevines ya están en movimiento, estos van a ser descargados en los estanques del laboratorio donde son alimentados y revisados para su selección y talla. De los 100,000 huevos (promedio) que son descargados, hay una perdida grande en el inicio, que es la etapa más crítica, con pérdidas de 10 al 20% de mortalidad

